lunes, 21 de mayo de 2018

Firma de "El color de la luz" en la Feria del Libro de Madrid

Son muchas las ilusiones que publicar una novela trae bajo la tapa. Una de las más bonitas, para mí, era tener la oportunidad de sacarla a pasear por El Retiro, con ocasión de la Feria del Libro de Madrid, que comienza el próximo viernes. 

Pues bien, ahí estaré, haciendo doblete. Que os paséis a verme puede ser la excusa perfecta para que disfrutéis de una tarde gloriosa de primavera por el parque, ya sea el jueves 31 de mayo, en la caseta de la Fnac, o el 7 de junio, en la de Casa del Libro (de jueves a jueves, y además, con los 29 años recién estrenados). Ya veis que el plan no presenta demasiadas fisuras. Os espero.





miércoles, 9 de mayo de 2018

Reseña de "El color de la luz" en Universo La Maga

http://www.universolamaga.com/color-de-la-luz/

Marta, la joven periodista que cubre las subastas de arte en la ciudad de Nueva York, contempla, tan asombrada como el resto de los asistentes, a la anciana señora de ojos enigmáticos que acaba de conseguir, por una cifra astronómica (después de pujar ferozmente), el cuadro de Martin Pedragón. La ve salir de la sala, altiva, abrazada a la tela, indiferente al murmullo de los presentes.

Marta se pregunta qué esconden la sorprendente tela y la frágil anciana, intuyendo que de alguna manera están vinculadas. Lejos está de sospechar que ella será la encargada de sacar a la luz la historia del más famoso pintor de la época y que la anciana resulta ser Blanca Luz Miranda, empresaria de éxito y conocida gerifalte del mundo textil. No esconde que el objetivo de amasar una gran fortuna es comprar arte.

También está lejos de sospechar que la millonaria la ha elegido para contar su historia. Ella será la encargada de desvelar el secreto siguiendo los tiempos que marca Blanca Luz.

Un amor imposible

Nos sumergimos de lleno en una novela que narra una historia de amor. De un amor al que vemos crecer, que perdura en el tiempo, a pesar de los altibajos, como si los vaivenes de la historia los zarandease uniéndolos y separándolos a su antojo. Un amor que ha sido imposible y ha marcado a los protagonistas profundamente.

No es un amor perfecto; la desconfianza, el egoísmo, la necesidad (a veces enfermiza) uno del otro, los separará y unirá. Una historia tan variable y tan cruel como los tiempos que les ha tocado vivir.

Blanca Luz lo ha sido todo para el artista desde que con apenas veinte años la conoció. El padre de Blanca Luz, el profesor Francisco Miranda, supo descubrir que Martín era un joven diferente y apostó por él, rescatándole de la vida que le tenían preparada.


Un recorrido a través de la Historia

Con un tono intimista, la autora nos traslada por diversos escenarios: la ciudad de Nueva York, la pequeña ciudad de provincias del Norte de España donde nació el amor entre Martín y Blanca Luz. París en los años veinte, adonde llegó Martín sin saber el idioma, sin dinero y con el corazón roto. Su refugio en La Ruche, la vida bohemia que descubrió, su contacto con los artistas más relevantes de la época. La Guerra Civil española, la Segunda Guerra Mundial, hasta el Madrid de los años ochenta.

Blanca Luz es un personaje singular. Veremos evolucionar a esta joven (decidida, alegre, bella, con ideas claras) hasta convertirse en un personaje no muy agradable: manipulador, voluble, en continua lucha de su corazón con su cerebro, no dudando en pasar como una apisonadora por la vida de amigos, arroyando todo a su paso.

Marta es una periodista honesta que, aun sabiendo que tiene en sus manos una gran historia, está dispuesta a no dejarse manipular por la millonaria. Si es preciso renunciará a todo si no se le permite llegar al fondo. Porque la misma historia puede ser muy diferente según el relato. Ahora, más que nunca, Marta está decidida a descubrir el vínculo entre la obra de arte y la millonaria.

La Historia, con mayúsculas

La novela contada con ritmo pausado, nos mete de lleno en una época difícil y en los entresijos de un amor del que podríamos decir: “ni contigo ni sin ti”. Unos años en los que lo difícil era sobrevivir, tanto a nivel físico, sentimental como ético. Los actos de engaño y traición pueden llegar a ser incluso justificables si los miramos sin ánimo inquisidor, dejando aflorar un soplo de ternura en nuestros corazones.

Como telón de fondo la Historia, con mayúsculas. Un siglo complicado que jugará con la vida de los protagonistas y demostrará que nada es definitivo. El arte es el hilo conductor de la trama, pero también la amistad, la generosidad, a la vez que el egoísmo y el engaño se utilizan cuando sus personajes lo ven apropiado.

Si te gustan las novelas de amor no edulcoradas bien contadas, con personajes que te atrapan, con sus grandezas y sus miserias, hasta llegar a considerarlos tuyos, seguro que vas a disfrutar con «El color de la luz».

jueves, 3 de mayo de 2018

Reseña de "El color de la luz" en el blog The lonely book

https://thelonelybook.wordpress.com/2018/04/30/el-color-de-la-luz-de-marta-quintin-maza/


Escritura: 4
Argumento: 4
Personajes: 5
WorldBuilding: 3
Desenlace: 4
La puntuación final del libro es: 4

Reseña del Libro

El Color de la Luz es la segunda novela de Marta Quintín Maza, una zaragozana nacida en 1989 que ha disfrutado de contar historias cortas desde que era una niña hasta que decidió dar el paso y lanzar novelas. Su primera novela fue “Dime una palabra”, a pesar de que actualmente solo está a la venta “El Color de la Luz”, su novela más reciente.

En cuanto a la escritura de su libro, se podría decir que tiene algunos errores generales, como párrafos demasiado extensos o capítulos demasiado largos que hubiesen quedado mejor dividiéndolo en varios, pero no es algo demasiado importante, más aún considerando la edad de la escritora, ya que es una escritura bastante buena para solo ser su segunda novela.

Sin embargo, lo que más destacaría es la forma en que esta contada. Al fin y al cabo, la historia que cuenta es una especie de biografía contada por otra persona. Este tipo de historias tiene el problema, de que la persona biografiada no esta contando su propia historia, sino que lo esta haciendo un tercero. De esta manera, la historia contada tiene que centrarse en lo que conoce la persona que la está contando, debiendo de dejar fuera cualquier parte privada que no pueda conocer por algún medio (carta del biografiado, o que el mismo se lo haya contado).

Este estilo de escritura, si está bien escrito, luce mucho, pero al mismo tiempo también es peligroso de escribir. En este caso, Marta ha sabido manejarlo bastante bien, sin embargo, algunos puntos de la historia me han resultado raros la forma en que están contados. Por estas razones, a pesar de que en general esta bastante bien escrito, no he podido darle la máxima puntuación.

En lo referente al argumento del libro, me ha parecido algo innovador. No solo la forma en que está contado, sino la historia en sí. Partiendo de la base de que no suelo ser un lector de romántica, y que tampoco soy un amante del arte, la historia ha sido apasionante. Es de elogiar en un autor, cuando es capaz de transmitirle a sus lectores, un gusto por algo que no tenían antes. En mi caso, gracias a esta lectura, he empezado a mirar a la pintura de otra forma, principalmente a los sentimientos que hay detrás de un pintor al crear sus cuadros.

No obstante, la razón de no tener la máxima puntuación se encuentra en el desarrollo del argumento. Tanto el comienzo como el final consiguen enganchar muy bien al lector, lo hacen una lectura rápida y entretenida. Sin embargo, hay varios puntos de las partes intermedias del libro que pierden algo de emoción, pero sin llegar a ser aburridos.

En cuanto a la construcción de los personajes, es la parte mas destacable del libro. Lograr que empaticemos y tengamos sentimientos por los distintos personajes de la historia es uno de los trabajos más difíciles del autor, porque, para eso, tiene que conseguir dar vida a personajes de ficción.

No obstante, Marta consiguió, no solo que yo me identificase y empatizase con uno de los protagonistas, sino que también le escribiese a una amiga que también se ha leído el libro para decirle cuanto odio al otro protagonista. Ese momento, en el que ya incluso lleva a una persona a compartir los sentimientos que tiene sobre un personaje, con otra persona, es donde se demuestra la buena construcción de los personajes que tiene el autor.

Sin embargo, en la construcción del mundo en el que se desarrolla la historia es donde mas fallos encuentro. Al comienzo del libro y hasta la mitad más o menos, franja en la que la historia se desarrolla en pocos lugares, la construcción del mundo esta genial, permitiéndole al lector imaginarse dentro de la historia. No obstante, en cuanto empieza a acelerar la historia, avanzando épocas y momentos, puede llegar a volverse un poco caótico, sobre todo cuando se cambia de plano en medio de un capítulo, de un párrafo a otro, sin separación ninguna.

Por último, el desenlace ha sido sencillo, en el que la autora ha terminado de afianzar toda la historia haciéndolo de manera simple y tranquila. En mi opinión, ha faltado esa ultima chispa que provoque el suspiro del lector al cerrar el libro por ultima vez. Por esa razón, no ha tenido la mejor puntuación, pero, aun así, ha sido una buena forma de terminar el libro.

En conclusión, “El Color de la Luz” es un libro que recomiendo a cualquier lector, independientemente de que lea romántica o no, ya que personalmente es una historia emocionante, de la cual incluso he aprendido algunos valores relacionados con los pintores, como pueden ser la autosuperación y la pasión por tu trabajo.

No obstante, como comenté antes, esta es la segunda novela de una autora joven, a la que le queda todavía mucha carrera por delante para perfeccionar su escritura y su estilo. Por esa razón, tras ser este el único libro que he leído de ella, estoy deseando ver como mejora y se desarrolla como escritora y, sin duda, leeré su próximo libro.